El head hunter madrileño es enfático "Es que ya no lo necesitás o no cumple con lo que de él esperas y además de la indemnización le pagas un outplacement. No lo entiendo".
Pese a este casi brutal sentido común, miles de empresas; reparticiones públicas y hasta ONGs invierten en buenos programas de outplacement o reinserción laboral.
He aquí algunas de sus razones.
Employee branding
La transmisión boca a boca de que una petrolera cuida de su personal, aún cuando se ve forzada a desvincularlos por la baja del barril, se vuelve una ventaja a la hora de atraer talentos.
Por el contrario, es tremendo el daño que hacen a la marca de empleador el dolor y el enojo de quienes no son bien tratados al dejar la empresa.
Imagen empresaria
Los gerentes desviculados por el laboratorio multinacional, buenos networkers, fortalecen el contacto con los colegas de la cámara: proveedores y autoridades regulatorias. Habiendo sido bien tratados y apoyados profesionalmente para su reinsersión, defienden genuinamente la imagen de su ex empleador; la confiabilidad de sus productos y la confidencialidad de sus estrategias.
Clima
La empresa de servicios distinguida por su clima laboral sabe que entre los contactos privilegiados de todo desvinculado están sus ex compañeros de trabajo. El compañerismo y la empatía hacen que el cuidado de quienes se van retorne como buen clima.
Responsabilidad social
Se agota el oro en una de las minas y la corporación pone en ejecución el plan de cierre. Uno de sus ejes es la remediación ambiental: el paisaje, los suelos y los cursos de agua deben quedar como antes de la operación.
Así también se encara la remediación social. Este gran empleador para la zona quiere garantizar post cierre el bienestar de sus trabajadores y de sus familias. Los gerentes expatriados serán reasignados y los locales deberán poder continuar sus carreras fuera de la corporación. El outplacement es clave ene l proceso de remediación social.
La estrategia debe anticipar los ciclos de negocios y las buenas políticas de recursos humanos evitar que el personal pague sus costos.
Profesionalización
La función de recursos humanos viene desde hace décadas ganando en profesionalidad, generando métodos y herramientas para gestionar el talento. Hay buenas prácticas consolidadas para los procesos de selección; capacitación, compensaciones y desarrollo. El outplacement contribuye con su know how y know why específico a profesionalizar la más difícil de la decisiones sobre el personal.
El buen outplacement contiene al desconcertado y temeroso para fortalecerlo como job seeker profesional. Serenidad, objetivos claros y metodología serán las ventajas competitivas del candidato con outplacement frente a quienes no recibieron este beneficio.